2005, Pöle Sud, Estrasburgo, Francia. Olga Mesa estaba con una Carta Blanca de esas y me invitó para trabajar con el sonido. Uno de mis trabajos fue una pieza para escuchar con auriculares mientras se pasea.
¿Cómo puede un paisaje sonoro entrar en dialogo con nuestra memoria? Mientras que cada persona camina, equipada con auriculares y un mapa, en el área que rodea Pí´le Sud, puede oir el diario sonoro que Nilo Gallego compiló con artistas, público y equipo artístico del théí¢tre Pí´le Sud en 2005.
¡Hola Nilo!
Jooooo!…Este año vimos a Olga Mesa en Laboral. ¡Qué aburrimiento! Se ha hecho tan mínimal que ha perdido todo el interés. Bostezaban hasta sus amigos. A ver si me cuentas algo de ella en vivo y en directo.
a mi me gusta q me dejen un tiempo para dormir cuando voy a ver algo al teatro o al cine.
Por favor, me parece una solemne tontería y falta de conocimientos de estos 2 últimos comentarios. Olga a quien sólo he visto en Francia posee algo tan íntimo, tan intenso, tan fuera de todo juicio de inexpertos que a mí que ni he hablado nunca con ella -que más quisiera- me me parece una barbaridad lo que comentan. No me estraña que no sepan leer los coreogramas de Olga Mesa. Está tna alta, se nos desnuda de tal forma que habría que estar a la altura de ella y entrar en ese color del mundo que ella quiere ofrecernos. Me parece un sacrilegio hablar así de una artista visual, coreógrada, autora de textos y dramaturgia como ella. Tal es que hace temblar a las piedras. Esto lo dijo un crítico francés una vez. Dios, que qué falta de sensibilidad para una artista de la talla de Olga Mesa.
Nilo,
Lloro de alegría al escuchar esta hermosura sonora.
Te quiero y recuerdo, cabronazo!
I.