Durante la semana que dejamos atrás, en la new poderosa, los 9 asistentes al taller de Cuqui Jerez estuvimos gestando regalos.
5 misiones, 5 regalos, 5 cartas durante 5 días para 5 espectadores desconocidos.
Pudimos trabajar de la mano de Cuqui el acto de regalar como acto performativo y como este te lleva a través de diferentes misiones a aventurarte en un viaje lleno de experiencias, anécdotas, historias que acaban en el encuentro de una dramaturgia singular y subjetiva que más tarde será compartida con un desconocido…
Una experiencia que me adentró en un universo metafísico, donde cada uno de los asistentes creamos múltiples mundos, en distintos estados de superposición. Una especie de experimento del gato de Schrödinger, donde a fuerza de gasear el día a día podías ir abriendo cajas y comprobar si el gato seguía muerto o vivo. Universos alternativos que cada uno de los asistentes fue creando.
Una especie de Baby-universe o una creación de tu propio big bang, en donde la abertura a la escucha te llevaba a conectar con una realidad totalmente nueva de tu día a día, creando lo que yo vendría a llamar una dramaturgia constelada fruto del fluir dentro de una misión muchas veces pre-establecida.
Un regalo comprobar que puedes crear tu mundo, que puedes hacer de cada día un presente para ti y tu destinatario . Que este nuestro universo puede ir viajando del macro al micro, de la calle al escenario, de la experiencia íntima a la colectiva , sin otro motivo aparente que el de sentir florecer el placer de regalar.