Happy Island
24 y 25 de abril en el Mercat de les Flors
La colaboración entre una compañía de danza integrada de largo recorrido internacional, Dançando com a Diferença, y el imaginario creativo de La Ribot han dado lugar a una pieza comprometida y humanista que desafía las ideas preconcebidas de las personas con discapacidad física y mental. Un grito a la vida desde la diferencia, reforzando la autonomía y la capacidad de desear de las personas con discapacidad.
Dançando com a Diferença es una compañía de danza inclusiva de Madeira fundada en 2001; gran referente internacional, está dirigida por Henrique Amoedo, que propuso a La Ribot la creación de una pieza; la artista no sólo aceptó el reto, sino que después de trabajar un tiempo es implicó directamente en la coproducción de la misma. Happy Island plantea un contexto completamente nuevo para ambas compañías, la culminación de un largo trabajo que resultó ser un viaje interior, en el que se cuestionaron límites y prejuicios gracias a la creación artística y a una visión profundamente humanista sobre la condición de las personas con discapacidad.
Maria Ribot, La Ribot, vive y trabaja en Ginebra; es una de las artistas españolas más internacionales. Su trabajo, que conjuga el vocabulario de la danza, el teatro, la imagen, la performance y las artes visuales, se ha podido ver en escenarios como la Tate Modern de Londres, el Centro Pompidou de París, el Museo Reina Sofía de Madrid o la Trienal de Aichi en Japón, entre muchos otros espacios. Hace dos temporadas el Mercat presentó Panoramix, espectáculo que reorganiza algunas de sus Piezas distinguidas. La Ribot ha sido galardonada con el León de Oro de Danza de la Bienal de Venecia 2020.