Se respira en el jardín como en un bosque
5 y 6 de diciembre en Temporada Alta
El Conde de Torrefiel invita al espectador a un ejercicio escénico para una sola persona. El individuo que entra en este bosque simbólico, que se parece mucho al artificio del teatro, ocupa el rol de intérprete y el de público, consecutivamente. Habrá momentos para mirar en silencio y otros para una coreografía de movimientos. Mirar y actuar, las dos acciones básicas del acto teatral. Una reflexión sobre la convención teatral y sobre cómo entendemos la realidad. Una de las compañías catalanas más inclasificables, rompedoras y con más proyección internacional ofrece un experimento sobre el deseo de mirar aquellos mundos artificiales que hemos creado.