No no no solo solo no
En este ciclo de artes escénicas, comisariado por Julián Pacomio para la Sala Amadís, participarán los artistas Ángela Millano, Xavier Manubens, Ignacio de Antonio Antón, Nazario Díaz, Víctor Colmenero Mir y Laia Estruch. Son 6 solo performances que convivirán entre ellas, simultáneamente, en el mismo espacio de presentación. Es decir, solos, que van a coexistir con otros solos en el mismo espacio y tiempo. Las presentaciones se articulan sobre la idea de ver, leer y contemplar dos cosas al mismo tiempo, de dejarte seducir por dos acontecimientos que suceden juntos y cercanos pero independientes.
El 8 de octubre tendremos el evento #1 con Ángela Millano y Xavier Manubens. En la pieza de Ángela Millano observamos cómo transformar un armario en un ataúd. Un cuerpo que en su vitalidad constructiva es interrumpido por la inevitabilidad de la muerte. Millano desembala pieza por pieza todos los utensilios y materiales que vienen dentro la caja de cartón recién llegada de los almacenes de IKEA. De manera minuciosa, paso a paso, despliega en el espacio cada maderita, cada balda, cada tornillo, y sin más, con su martillo, percutiendo golpes, construye un ataúd. ¿Y tan parecidos son un armario y un sarcófago? Pues igual sí. Al mismo tiempo, en el mismo espacio, Xavier Manubens lija una silla de madera hasta hacerla polvo. Con ayuda de una herramienta mecánica va puliéndola hasta hacerla desaparecer, hasta pulverizarla y deshacerla en pedazos pequeños. La silla, mueble básico y funcional por antonomasia, objeto destinado a sujetar un cuerpo siempre, ahora, no solo sirve para estar sentado, sino para establecer una relación dinámica, para conversar con ella, para adquirir posiciones acrobáticas, gimnasias y contorsiones.
En el evento #2, que tendrá lugar el 30 de octubre, veremos a Ignacio de Antonio Antón y Nazario Díaz. En la pieza de Ignacio Antonio Antón la puerta que da acceso a la sala obliga a la audiencia a recorrer y atravesar el espacio vacío. Ignacio De Antonio Antón aparece como un cómplice más que como un performer, que se nos acerca y se aleja, que nos susurra algo al oído y luego desaparece. Tenemos a un performer que es una suerte de cómplice o dealer para el público, tenemos una pieza con un dealer cuyo producto y cuya sustancia es la coreografía. Tenemos un dealer de la coreografía para la audiencia. En este traficar hay cosas que suceden y que no consigues mirar todo el tiempo, hay cosas que le pasan a los otros y que no te pasan a ti, hay cosas que suceden fuera y otras dentro de la sala. A la vez, también dentro y fuera del cubo blanco, está Nazario Díaz, vemos un cuerpo en un acto sutil que con sólo su presencia (y ausencia) lleva a cabo toda una transformación fonética, un flujo vocal que se hace presente a medida que la performance avanza; aparece la voz y desaparece el cuerpo (la idea del borrado a través de la insistencia) y coloca su cuerpo en colisión con el lenguaje, pirotecnia vocal y pirotecnia corporal. En ese juego de voz parece activar casi-palabras, parece casi-decir-cosas. Insiste, insiste en ese decir-no-decir, y entiendes alguna frase pero a la vez no entiendes nada, y le sigues y acompañas en ese hablar-y-no-hablar.
La última sesión, el 12 de noviembre, veremos a Víctor Colmenero Mir y a Laia Estruch. En esta ocasión lo sonoro es lo importante. El oído más allá del oído. La performance y el sonido. Lo sonoro y el concierto. Los conciertos y los instrumentos que no son instrumentos que son esculturas que son objetos. En el tercer evento tenemos a Víctor Colmenero Mir como un músico-performer-zahorí que busca un pozo de agua y sonido; y tenemos a Laia Estruch con un abrevadero que no es para beber sino que es para cantar y que lo se que canta en el abrevadero es cantarle al agua con el agua. Este encuentro tiene la potencia de ver en común dos trabajos con la intensidad vibracional como el protagonista. Dos acciones que oscilan entre lo tangible y lo intangible. Dos performances que navegan entre las ondas sonoras, el temblor y los acoples. Dos músicas sobre lo táctil, lo háptico y sobre escucha más allá del oído, la escucha con el cuerpo entero.
Lugar: Sala Amadís Injuve (c/ José Ortega y Gasset, 71. Madrid)
Aforo completo. Lista de espera a través del correo creacioninjuve@injuve.es