Sobre todo en la última etapa de mi estancia en Nueva York, estuve trabajando con el joven coreógrafo y videoartísta Jason Akira Somma. Nos juntabamos por las noches con su pandilla de bailarines y performers de forma quasi-clandestina en estudios de coreógrafos mayores para grabar una serie de videos que llegamos a nombrar entre nosotros como Los archivos perdidos del futuro.
Aquí os muestro un pequeño clip de un bailote mezclado en directo, de una toma, sin cortes ni edición post-producción. Observen como luz rebotada entre cámara y proyector se refracta a través del mixer haciendo de mi cuerpo METAMATERIAL como pedazos de cristal fotónico, transmitiendo un efecto kaleidoscópico e hipnotizante y reflejando multiples referencias en todas las direcciones a la vez.
Ya había mencionado el potencial filosofísico de los poderes refractivas del metamaterial doble negativo aplicados al cuerpo en el blog de proceso con las APATCHES.
Lo que ocurre cuando la permitividad y permeabilidad de un material es negativo, proporcionándole un índice de refracción negativa. Es decir, en términos científicos, un material ‘zurdo’ que no obedece la ‘regla de mano derecha’ y que permite que una onda electromagnética transmita energía ‘al revés’, en la dirección opuesta a su velocidad de fase. O sea, que es capaz de desvíar energía ‘hacía atrás’, en una dirección que no debía, o que no es, creando fenómenos tan acojonantes como resonancias, túneles anómalos, transparencias, invisibilidad y zero reflejo.
Un viaje lumínico representado de forma más sencilla en el siguente video-gráfico:
Aplícalo. Y flipa en colores de todo el espectro.
Vx