Roger Bernat: 5 espectáculos que me fascinaron + 1

Extraido de la web de Roger Bernat / FFF.

————————————-

Hace unos días me llegó un misterioso mail firmado por unos “pájaros”. en él se me preguntaba sobre 5 espectáculos que me hubieran gustado en los últimos 10 años.

jardinería humana (rodrigo garcía): era el ensayo general y, como actuaba mi novia, me fumé un porro para no focalizar. el espectáculo me arrastró como una tromba de agua y casi tres horas más tarde me depositó frente a la última escena: un personaje que llora lágrimas de papel. había tanta rabia en ese espectáculo como dolor en la última escena. pensé que un espectáculo así sólo se veía una vez cada 5 años. apenas había una docena de espectadores en la sala. nadie aplaudió. en los camerinos los intérpretes escuchaban las indicaciones de rodrigo ajenos a lo que acaban de hacer. al día siguiente volví a ver el espectáculo. no eran las drogas, el espectáculo te arrastraba de verdad.

todos los buenos espías tienen mi edad (juan domínguez): éramos 10 personas en el teatro. un número idóneo para el espectáculo que íbamos a ver. juan iba mostrando tarjetas con pequeños mensajes que se proyectaban en la pantalla. no decía ni una palabra sino que leíamos un largo texto que hablaba de un proyecto teatral que, finalmente, era el que teníamos delante. recuerdo que la explicación del proyecto nos enfrentaba al artista buscando un espectáculo mientras las horas van agotándose en el estudio. de la misma manera que los minutos iban agotándose en el teatro mientras veíamos el espectáculo y, a fin de cuentas, el mismo tiempo que se consume en cualquier vida siempre plagada de esos proyectos que enmascaran el futuro.

the real fiction (cuqui jerez): hacia el final del espectáculo creía que la cabeza me iba a estallar. al empezar parecía un ejercicio muy en la onda de la no-danza. de hecho algunos espectadores ya abandonaban la sala a la media hora de haber empezado, pero al cabo del rato se convertía en una máquina que iba sumando dimensiones. lo que al principio se circunscribía al escenario, poco a poco fagocitaba todo aquello que le rodeaba. el público acababa formando parte del espectáculo, así como el técnico de la compañía, los del festival e incluso (allí es cuando creí que la cabeza me estallaba) los bomberos de la ciudad que aparecían para ser a su vez parte de la ficción. me fascina el placer de cuqui jerez por generar mundos paradójicos, me hace pensar en la película origen de christopher nolan.

figures (germana civera): había tanta gente en la sala que nos tocó estar de pie en la última fila. en el espectáculo no había más palabras que la grabación de la voz de germana que explicaba diferentes situaciones de su propia vida en las que su rostro había sido protagonista. contra la pared del fondo se proyectaban fotografías de su cara mientras ella, en el centro del escenario, se mantenía seria, inmóvil, callada y mirándonos concentradamente. por alguna razón que todavía se me escapa me brotaron lágrimas de los ojos. al mirar a mi compañera me di cuenta que ella también tenía las mejillas bañadas. el espectáculo sólo duraba 30 minutos pero no pudimos dejar de llorar hasta el final. era uno de esos espectáculos en los que, al final, costaba aplaudir.

historia(s) (olga de soto): olga de soto buscó a diferentes espectadores que hubieran asistido a las representaciones de el joven y la muerte de cocteau, estrenada en parís en el 46. el espectáculo mostraba los fragmentarios testimonios grabados en video de todos esos ancianos recordando el mítico ballet. al principio, como en un thriller, perseguía la reconstrucción del ballet pero enseguida aquello perdía interés porque el recuerdo era un acto presente y los testimonios de los espectadores eran el verdadero espectáculo. un espectáculo en el que el joven y la muerte, protagonistas del ballet original, habían envejecido en el cuerpo de los espectadores otorgándoles así la ligereza y profundidad que un día tuvieran sobre el escenario. al salir de la sala daban ganas de envejecer en los teatros.

SOS (yan duyvendack): había una pregunta que me asaltaba a menudo. me preguntaba qué pensaría de un espectáculo mío si lo viera como espectador, si me acercara a él con la “demanda” con la que me acerco habitualmente a los teatros. vi SOS el día de su estreno y apenas sabía nada del trabajo de la compañía. a los pocos minutos de empezar entendí que ese espectáculo podía haberlo hecho yo. me atornillé a la butaca algo temeroso. la mecánica del espectáculo hacía que no terminara hasta que el último espectador saliera de la sala. la gente que me acompañaba, como tantos espectadores, iban abandonando a medida que el espectáculo superaba los 90 minutos, los 120, etc. yo aguanté hasta el final, hasta que en la sala no había nadie más que los actores y yo. el estómago me hacía retortijones emocionado ante un espectáculo mío en el que no había invertido ni una hora de trabajo y que, sin embargo, me fascinaba.

HOY: ESCENAS DE NAVEGACIÓN (Plataformas Virtuales, Cuerpos y Tecnologías)

Hoy en Bogotá y para continuar con los lazos que nacieron en labSurlab de Medellín nos reuniremos unos cuantos a charlas sobre artes escénicas y tecnologías y de paso presentaremos TEATRON en Bogotá. Una buena instancia para vernos las caras, reconocernos y comenzar a estrechar lazos.

El evento será emitido por streaming a través de TV-Tron: www.livestream.com/tvtron

—————————

ESCENAS DE NAVEGACIÓN *
(Plataformas Virtuales, Cuerpos y Tecnologías)

Lugar: ESPACIO AMBIMENTAL. Calle 9 #2-17. Bogotá, Colombia.

Horario: Martes, 26 de abril · 18:00 – 20:00

Sobre la relación de tecnologías y el espacio escénico, redes de navegación y plataformas virtuales como espacios de circulación y creación, serán los tópicos tratados con el artista Txalo Toloza-Fernández.
“CONVERSACIÓN SOSTENIDA”

Interlocutoras Jenny Fonseca y Soraya Vargas
Moderadoras: Natalia Orozco – Ingrid Sierra
Presentación: José Luis Tahua Garcés

EVENTO ALIANZA CÁMARA DE DANZA / ESPACIO AMBIMENTAL

En Co-producción con:

UNIVERSIDAD ANTONIO NARIÑO
FUNDACIÓN IMAGEN EN MOVIMIENTO

La consagración: Instrucciones de uso

Imagen 1

Instruccions d’ús.

Com amb la majoria d’electrodomèstics és més fàcil deixar les instruccions de banda. Si, tot i així, tu lector decideixes saltar-te la primera de les Instruccions d’ús, aquí venen les altres:

Els meus últims projectes (Domini públic, Pura coincidència i La consagració de la primavera) ignoren l’aura benjaminiana que el teatre del segle XX s’ha entestat a conservar. Són espectacles que, enlloc de recolzar-se en la presència i emocions de l’intèrpret, s’afirmen sobre un buit enfrontant l’espectador a un dispositiu. Però què significa enfrontar-se a un dispositiu?

1. En no poder-se identificar amb l’actor o l’escenografia –primera acció de l’espectador de teatre– i sense altres coordenades que uns senyals en un teatre en el que el públic és l’únic habitant, l’espectador ha d’actuar per afirmar el seu desig. A diferència de l’espectador que desde la butaca estant jutja allò que un grup d’intèrprets desplega davant dels seus ulls, l’espectador inmers en un dispositiu ha de decidir quines són les indicacions que el portaran a ser testimoni de l’espectacle i, el que és més difícil, ha de decidir què és una indicació. Què és de tot allò que l’envolta allò que el parla a ell? I, un cop identificat el senyal a la paret, la veu en l’auricular o el llum encès al final de la sala, decidir seguir-les cegament, quedar-se a una prudent distància o mantenir-se’n al marge. Inmers en el dispositiu l’espectador pren decisions i actua, i és en participar que l’espectacle s’expressa i el reivindica.

2. El terror de tot espectador és convertir-se en actor. La violència que s’exerceix per col·locar l’espectador en la posició de protagonista fa de tota participació un mecanisme macabre que afirma el poder de qui la permet. En canvi, el dispositiu no és un element extern que convidi a participar sino que situa l’espectador en una situació d’inmersió. L’espectador es troba en una realitat ficcional com l’avatar en el videojoc. No hi ha cap espectador privilegiat que observi els espectadors, aquests habiten un espai durant el temps que dura l’espectacle i és en transitar-lo que es genera la ficció. Tots i cadascun dels espectadors esdevenen així actors i els que decideixen quedar-se en el perímetre i observar, lluny de conservar el seu status d’espectadors, són a la vegada actors que representen el paper d’observador.

3. Però el preu d’actuar és construir la pròpia soledat. L’espectador s’enfronta a un mecanisme que l’individualitza separant-lo de la resta d’espectadors. Aquesta soledat, que d’altra banda és més fantasmal que física donada la presència d’altres espectadors a la sala, és accentuada perquè, tal i com apunta Roberto Fratini, «el contingut vocacional de tot dispositiu és l’evacuació de tota autoritat, quan no de tota autoria». L’espectador no està davant d’un sistema fort del que cal protegir-se, com seria el cas dels espectadors guimbant en els primers espectacles de la Fura dels Baus, sino que, elidida la part actant de l’espectacle, ha d’experimentar la sensació de pèrdua de qui busca quelcom que desconeix en un escenari sense coordenades.

4. I tanmateix, en sotmetre’s al mecanisme que permet l’espectacle, l’espectador estableix nous vincles amb aquells que experimenten la mateixa pèrdua en la foscor d’un teatre intangible. El dispositiu aïlla enfrontant l’espectador al seu desig (d’espectacle) i alhora problematitza el concepte de pertinença al grup. Què diem quan utilitzem la paraula nosaltres? I nosaltres enfront de què? Tot i que l’estratègia de tot dispositiu sigui passar desaperçebut esborrant-se, en afirmar un nosaltres és inevitable fer-ho enfront d’un altre que en aquest cas és el sistema que permet l’espectacle. En algun moment de l’espectacle és inevitable formular-se la pregunta de qui ha deixat aquells senyals que l’espectador segueix i amb quins objectius.

5. L’espectador es troba davant d’una forma que es reivindica a través de la presència del públic. El públic vol veure un espectacle però a canvi ha de formar-ne part. Es produeix així una tensió que, si bé és consustancial al binomi obra-subjecte, aquí és especialment palesa. Agamben escrivia en el seu breu assaig Què és ser contemporani que tot dispositiu «està inscrit en un joc de poder». L’espectador segueix les regles d’un joc del que desconeix els objectius i tem les servituds. Està en mans d’un mecanisme acèfal –com l’univers, la natura o la xarxa de metro– que sembla funcionar al marge de l’espectador. Només en transitar-lo aconseguirà extreure conclusions mentre decideix si obeïr o conspirar o, en una versió perversa de l’eqüació, obeïr conspirant. Però en tot cas l’espectador haurà de pagar amb el propi cos i comprometre’s.

—————————–

Este fin de semana (viernes 29 y sábado 30 a las 21h) actuamos en el Mercat de les flors de Barcelona con La Consagración de la primavera. Es nuestro último espectáculo. Lo estrenamos el año pasado en México y después en varios teatros, entre los que hay el Teatre Lliure y el Centro Pompidou de Metz. No es habitual que la gira nos lleve dos veces a Barcelona, así que probablemente sea la última oportunidad de ver esta pequeña maravilla, homenaje a Pina Bausch en la ciudad condal. Como ultimamente paramos poco por Barcelona será la oportunidad de vernos y celebraremos entre otras cosas, el dia munidal de la danza.

Al acabar el espectáculo, el Mercat de les Flors proyectará La consagración de la primavera en la versión que hizo Pina Bausch en el 1975, obra con la que nos hemos basamos para nuestro homenaje.

El Festival Teatro Gayarre de Pamplona será la próxima programación nacional que incluia nuestro espectáculo, el 21 de mayo.

Aproximación a la idea de sampler.

«Pero si el sampleador menciona otras voces – si a veces es un «imitador de voces» como decía Thomas Bernhard -, no es porque se apropie sino porque vive en su momento, sale de casa, es sensible a los signos y formas del paisaje mediático y se cuida de señalar la procedencia de sus ideas. La diferencia entre samplear y plagiar es bien clara, y la resistencia a reconocer la originalidad del sampleador es un prejuicio premoderno: si no fuera legítimo usar y recombinar los elementos del mediascape, entonces sólo nos quedaría el paisaje anterior, aquella Naturaleza que, a decir de Samuel Beckett, «no ha abandonado». Pero, sobre todo, lo que el sampleador hace suyo no es un fragmento ajeno, sino un instante que le había sido robado. Esta idea la ha formulado con exactitud el historiador alemán Diedrich Diedrichsen, quien propone redefinir el sampler no ya en relación con los supuestos materiales de partida, sino en relación con el curso narrativo:

El trabajo de los djs no es un trabajo de desmembramiento y montaje – o collage – sino un trabajo de reconstrucción. El dj no era, como opinan muchos intérpretes posmodernos, un artista del pastiche, la cita o el enfrentamiento, sino un artista de la reconstrucción, que operaba en contra de la forma «canción» es decir, en contra de la reconciliación entre historia, repetición, ritmo y épica que aquella forma ofrecía.»

(Extraído de Homo Sampler. Tiempo y consumo en la era Afterpop. De Eloy Fernández Porta)

Imagen 1