“Cantar para no llorar…”, decía Chavela Vargas en una entrevista reciente, mantenida en la Residencia de Estudiantes, con motivo de la publicación de un libro y dvd en homenaje a Lorca.
“Bailar para no llorar, bailar para distraer la muerte…”, podría haber sido alguna de las muchas frases con las que Claudia Faci artícula su última propuesta, un tríptico a modo de recopilación de sus últimas creaciones, en las que recorre vida, obra y cuerpo, en una suerte de geografía del desastre que concluye (parece) en punto y aparte.
Construyo sobre el olvido es el nombre de esta pieza en la que la Faci despliega una energía poco correspondiente con su aparente fragilidad física. No tanto un animal como una suerte de deidad escénica. Capaz de generar una empatía, no sólo respecto a su historia, sino, sobre todo, a través de las zonas de dolor que señala en escena. Claudia construye el discurso a partir de su propia experiencia, un discurso que en ocasiones deviene en verborrea, se expone, se cuestiona, y sin embargo, no resulta soliloquio o monólogo interior, logra interpelar al espectador, generar un tipo de comunicación que, aun unidireccional, crea una ficción de diálogo fluido.
La acción final, cuchillo en mano, abre, disecciona y es puerta de entrada a ese tunel que funciona como lugar de encuentro entre ella y el público. Resistir es la manera que Claudia Faci parece haber elegido para hacer de su vida una política en escena.
http://youtu.be/KD_EHCba6MI