O como salir de casa sin abandonar el comedor.
O como salir de casa sin abandonar el comedor.
«La casa de un hombre no es su castillo, sino su teatro-museo.»
«Todas las obras de arte nacen iguales y con los mismos derechos para resonar en las subjetividades de los seres humanos.»
«Me revientan las compañías de danza belga con 20 intérpretes.»
«Sólo cuando la esfera privada y la esfera pública coincidan totalmente podrán mitigarse las formas de dominación. Sólo cuando veamos al Presidente defecando en su cuarto de baño entenderemos que no detiene ninguna autoridad sobre nosotros.»
«El contexto es tan importante como la obra.»
«El arte de estar por casa es el mejor de todos los artes posibles.»
Dimensiones variables.
Material: pelusa, cabello, mugre, agua, cal, dentífrico.
El Teatro-Museo Pujol alberga también una residencia para los miembros del patronato de la fundación. En la primera fotografía aparece Edu Villanúa (responsable de administración, producción y colaborador artístico), en la segunda y tercera foto se muestran los dormitorios de Quim Pujol y Edu Villanúa respectivamente.
El Teatro-Museo Pujol, fuera del horario de abertura
La Fundación Edu – Quim Pujol tiene el placer de anunciar la inauguración del Teatro-Museo Pujol en la calle Brosolí nº1. A partir de ahora Quim Pujol no sólo será «crítico con peluca», sino «performer en zapatillas». Eso significa que sólo desarrollará su trabajo dentro de su casa, aunque ocasionalmente se presentarán obras en hogares ajenos. En este blog se anunciará la programación del Teatro-Museo y se mostrarán piezas de los fondos de la colección.
Fragmento del discurso de inauguración de Quim Pujol:
Si con «crítico con peluca» quería expresar que todo el mundo puede hacer valoraciones personales sobre las piezas, con «performer en zapatillas» deseo afirmar que todo el mundo puede crear obras de arte, por muy pocos medios que posea y aunque sea fuera de circuitos institucionales. Con esta doble personalidad, me apropio de la parcela de poder que me pertenece: el discurso es mío.
También tú puedes apoderarte del discurso. Si no lo empleas es porque no quieres.