Sobre el retorno de la posibilidad de desmontar las monedas. Es posible. Inténtalo.
Sobre el retorno de la posibilidad de desmontar las monedas. Es posible. Inténtalo.
Me encantó la idea de desmontar las monedas como posibilidad de intervenir sobre el dinero. En el vídeo que te envío, unos artistas hacen una transformación irreversible de la suma de dinero obtenido públicamente en una subasta. Eso sí, con la promesa de devolverlo a sus dueños, después de ser digerido y en un nuevo formato resultante.
YES, (con suficiente dinero) WE CAN!. Políticos hechos con dinero. Una subasta hecha enteramente vía YouTube. Después de haber desmontado y digerido dinero, ahora este dinero nos enseña los cimientos de la política.
La pasada semana tuvimos elecciones generales para el congreso y el senado en España. Un colectivo de personas organizó una falsa campaña llamada ‘cajero electoral’ bajo el lema ‘ingresa tu voto’. La idea consistía en invitar a la gente tres días antes de las elecciones reales, a ir a la sucursal bancaria más cercana a su casa, a depositar su voto. La crítica detrás de la iniciativa es que no es necesario votar a un candidato político, sino que resulta mejor hacer un “voto práctico y económico” al banquero, que es quien en realidad decide por tu vida política y económica. De este modo, algunas personas realizaron esta performance y se acercaron el día 17 de noviembre a los bancos solicitando la urna en la que poder votar. Aquí tienes el ejemplo en vídeo de lo que allí se encontraron.
Así es, Susana…
Mientras que para unos el dinero es un problema, para otros el dinero es un milagro.
Hasta ahora, hemos encontrado aproximaciones muy diferentes e interesantes a nuestro objeto de estudio: el dinero. La mayoría de nuestros vídeos, hablan desde una perspectiva artística, activista o casera (do it yourself). Sin embargo, creo que existen iniciativas sociales que buscan generar nuevas relaciones con el dinero que merecen ser destacadas en nuestra conversación.
Una que me llama mucho la atención y que recibe poca atención desde los medios informativos en general, es el uso de monedas locales o comunitarias, una posibilidad de generar riqueza local que está legalmente aceptada y que se practica en muchos lugares del mundo. Un pueblo en el estado de Nueva York tiene su propia moneda llamada Horas, o las alternativas al euro en el marco de la crisis europea, como el Fiorito y el Rupi. Creo en cualquier caso, que Brasil es un país pionero por su espíritu comunitario en este tipo de iniciativas, y buena muestra de ello es el caso de la moneda Palmas, creada en el año 1998 para potenciar la economía y el emprendedurismo local en Ceará. Tanto es así, que ha sido recientemente un ejemplo para los integrantes del programa Pontos de Cultura de Brasil. En este vídeo puedes ver una breve explicación sobre el funcionamiento de las Palmas y también como desde una perspectiva cultural, supone un giro radical en la forma de pensar el dinero. Cuando parece que las grandes monedas eran la solución (euro, dólar) resulta que empieza a proliferar el uso del dinero local. ¿Cómo lo ves?. ¿No será un giro del hagalo usted mismo (do it yourself) al hagámolos todos juntos (Do it together)?
Renata, qué pregunta tan pertinente la que me haces en tu última videocarta (¿qué mantiene al hombre vivo?). ¡Y cuánta relación tiene con las nuevas ideas que se generan en una época de crisis general para transformar las formas en las que socializamos, negociamos y creamos a través del dinero! Efectivamente, cuando se habla de economía, se habla de política. Por lo tanto, podríamos decir que descubrir nuevas formas de hacer política son también nuevas formas de entender y relacionarnos con el dinero. Hay muchas vídeos en YouTube de gurús y proyectos de economías solidarias, trueques y formas alternativas de redistribución de la riqueza.
Pero quisiera centrarme más en la idea del hombre vivo, y de los jóvenes en particular. Mi respuesta habla de un proyecto de jóvenes brasileños llamado Ómnibus Hacker. Se trata de un colectivo activista (Transparencia Hacker) que pide apoyo económico a través de una plataforma de crowdfunding para comprar un autobús que pueda moverse por muchas ciudades de Brasil, para crear proyectos con la gente local en torno a temas de software libre (gratis y compartido), open data (información transparente sobre presupuestos estatales, patrimonio económico de los políticos), con la intención no solo de fiscalizar a los dirigentes sino para impulsar propuestas participativas o usar el espacio público como ágora para despertar la conciencia y el debate. Justo lo que vemos que pasa diariamente en muchas partes del mundo últimamente.
Lo que me llama la atención del vídeo que te envío, es esa idea de actuar y pensar de una manera diferente en nuestra vida cotidiana, de participar activamente en la creación de nuevas formas de vivir el mundo que tenemos, el empleo de la tecnología como herramienta viva y transformadora. Los jóvenes del proyecto que te envío están vivos, creen que otra forma de hacer es posible, sólo tienes que confirmarlo viendo el vídeo.
¡Ha sido un placer charlar contigo!