El día 17 de octubre se inaugura Time Again en la galería The Private Space, en el marco del Festival Escena Poblenou. Durante estas dos semanas voy a contextualizar el trabajo de los artistas que conforman el proyecto para facilitar la comprensión de sus trabajos al público general.
El primer performance que se presenta el 17 de octubre a las 19.30h es el de Quim Pujol, “Sin título”. En esta entrevista explica su trabajo conceptual.
“¿Cómo llegas a interesarte por la relación entre performance e historia?
A finales del 2009 Isabel de Naverán e Idoia Zabaleta me invitan a participar en “Autonomía y Complejidad”, un proyecto de investigación financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación que trata de “de examinar cómo las prácticas performativas contemporáneas se relacionan con las prácticas performativas del pasado reciente, y cuáles son las similitudes, las diferencias y las cuestiones que surgen de dichas relaciones”. Este grupo de trabajo consiste en una serie de seminarios espaciados en el tiempo con artistas y pensadores tan interesantes como Janez Jansa, Myriam Van Imschoot, Pedro G. Romero o Ana Vujanovic. Durante unos días, nos reunimos en Azala, el espacio de Idoia Zabaleta en la sierra de Álava, y estos seminarios se alternan con procesos de investigación individuales o en grupos en relación a los temas que se plantean siguiendo nuestros propios intereses.
¿Puedes explicar los primeros pasos de esta investigación?
Durante unos meses mi investigación se centra en prácticas performáticas de los años 70 en Cataluña que, aunque han sido objeto de exposiciones recientemente, siguen sin resultar muy conocidas, sobre todo en el circuito de las artes escénicas contemporáneas: Olga Pijoan, Carles Pazos, Lluís Utrilla, Sílvia Gubern… De esta primera fase surge un texto alrededor del Festival de Cadaqués que se planteó como alternativa catalana a los Encuentros de Pamplona del 72. El artículo se publicó en el primer número de la revista Efímera pero también se puede leer en Internet: artesescenicas.uclm.es/archivos…/Quim_Pujol_Festival_Cadaques.pdf
¿Por qué abandonas la investigación sobre el Festival de Cadaqués?
A pesar de que encuentro materiales maravillosos, a medida que investigo lo que realmente me cautiva no son tanto las performances de los años 70 sino textos que implican diferentes concepciones del tiempo y la historia. Así pues, el resultado final de este proceso no tiene tanto que ver con la relación entre performance e historia, sino con la historia en sí.
¿Por qué decides trabajar con “Se hace camino al andar” de Esther Ferrer?
En nuestra cultura, la historia se suele entender como algo lineal. Todos recordamos las líneas temporales que se trazan en el colegio donde los acontecimientos se convierten en puntos de esa línea. La performance de Ferrer donde camina sobre una recta me servía como base para proponer otras concepciones del tiempo que no tuviesen que ver con la linealidad. Naturalmente, en la performance de Ferrer el objetivo es mostrar la agencia, su capacidad para decidir cómo elije su propio camino. En este sentido, me centro en una característica menor de esta obra de Ferrer para tratar algo totalmente distinto.
¿Cómo has trabajado concepciones alternativas de la historia en “Sin título”?
En un primer momento me centro en modelos geométricos que sirven para explicar estas otras maneras de entender la historia. Por ejemplo, el relámpago puede representar la concepción del tiempo de Walter Benjamín, la línea discontinua sirve para explicar la noción del tiempo en “Mal de archivo” de Derrida, el círculo puede representar el Eterno Retorno de Nietzsche, la sinusoide puede representar los altibajos de procesos cíclicos como la economía o una línea que se interrumpe de forma abrupta ilustra el concepto de tiempo mesiánico de Agamben. A pesar de que muchas de estas formas se mantienen en la performance, sin embargo esta parte teórica termina por convertirse en algo secundario.
¿Por qué?
Llegados a un punto del proceso tenía dos opciones. O bien decantarme por una performance de tipo teórico o bien dejarme guiar por las lógicas de la manipulación material que estaba llevando a cabo. Debido a que la exposición teórica podía hacerse fácilmente mediante una conferencia o un artículo, preferí utilizar el tiempo de ensayo del que disponía gracias a un “Espacio cómodo” de La Porta para explorar la lógica material. El resultado es una composición visual, sonora y rítmica donde resulta casi imposible inferir todas estas reflexiones.
¿Quiere eso decir que al final el discurso sobre la historia ha desaparecido de la pieza?
No resulta tan sencillo. En primer lugar la historia está muy presente en la performance en la medida en que trabajo con la desaparición y la ausencia. Como explica Paolo Virno en “El recuerdo del presente”, la historia es aquello que no está presente y tiene que ver con la potencia. Esta también es la razón por la cual la pieza se queda “Sin título”: una pieza sin título podría tener cualquier título y apunta hacia la potencia. Además, la performance produce un objeto que es un documento “histórico” de la acción que se lleva a cabo.
Por otro lado, confío en que el proceso de investigación teórico y los descubrimientos físicos y materiales de los ensayos hayan conferido una coherencia interna a la composición estética. En una conferencia reciente en la Fundació Tàpies, Jean-Luc Nancy hablaba del “sens qui se fait sentir” (el significado que se hace sentir), ya que no hay ningún significado que sea puramente intelectual y siempre tiene una vertiente sensorial. Al final y al cabo, explicó Nancy, una idea es una forma.
Esta performance sólo será efectiva en la medida en que los espectadores perciban este “sens qui se fait sentir”.”
“Sin título” se presentó hace casi un año en un Sweet de La Porta y el pasado mes de junio en la última edición del Festival In-Presentable, en La Casa Encendida (Madrid).
Es la primera vez se presenta en una galería y me gustaría comunicar que la duración de la pieza es de 35 minutos y que no habrá espacio para sentarse. El aforo es bastante reducido y por tanto intentaremos que no haya mucha circulación de gente entrando y saliendo, por respeto al performer.
Las cervezas y el vino vendrán después.