Reenvío-Performance

En un post anterior incluíamos una conversación informal con Javier Bassas, en la que nos hablaba sobre la idea de huella en Derrida. Nos contaba que para el pensador francés “la presencia misma es huella, no hay presencia originaria, de entrada ya hay siempre presencia que es recuerdo de otra cosa; de ahí el reenvío…”.
En ese reenvío entre la presencia y la huella, que Derrida también aplica a la idea de sujeto, podría situarse la performance, no reducida a un supuesto evento originario, sino ocurriendo en el reenvío que un evento establece con un futuro indefinido de reproducciones.
Casualmente (o no), ese mismo día registramos el reenvío tecnológico que ocurre cuando se graba con una cámara la pantalla de un monitor en el que se está proyectando esa misma grabación. Se genera así una imagen electrónica mutante e impredecible, que parece querer escapar a la misma posibilidad de registro, y que, sin embargo, nos remite gráficamente a la huella…