Me ha llegado esto vía e-mail.
Entiendo que donde dice Esto es una convocatoria de encuetro en nuestro masivo en nuestro teatro quiere decir Esto es una convocatoria de encuentro masivo en nuestro teatro.
El texto original se encuentra aquí:
http://tomemosoteatro.wordpress.com/
«Aquellos que profesan la libertad, y aún así, desvalorizan la agitación, son hombres que quieren cosechar la tierra sin ararla. Ellos quieren lluvia sin rayos ni truenos. Ellos quieren el océano sin el imponente rugido de sus aguas. Esta lucha puede ser moral, o puede ser física, o puede ser moral y física, pero debe ser una lucha. El poder no concede nada sin una demanda. Nunca lo hizo y nunca lo hará”
Frederick Douglass, abolicionista americano, Carta a un asociado de 1849
Tenemos muchos puntos en común.
Compartimos deseo de ser. Compartimos necesidad de estar.
Compartimos la carencia del espacio para llevarlo a cabo, la carencia de espacio para pensar y expresar.
La carencia de auditorio, de escenario, de teatro.
Compartimos la capacidad para conseguir ese espacio.
La cultura no es arte.
El Arte no es una actividad que tenga la produción, el consumo masivo y el lucro económico como finalidad.
El Arte no es industria.
En algún momento se implantó en nosotros la idea de que los auditorios, los escenarios, y las calles no nos pertenecen. De que no tenemos derecho a ellos. De que non son responsabilidad nuestra.
Los teatros son nuestros. Los teatros nos pertenecen a los espectadores, a las actrices, a los bailarines, a las escritoras, a los flautistas, a las poetas, a los profesores, a las directoras, a las estudiantes, a los trabajadores…
Los teatros son de nuestra propiedad.
Esta situación, en la que nuestros instrumentos y plataformas de comunicación están siendo controlados y manipulados por hombres y mujeres carentes de ética y estética, de inteligéncia y creatividad, puede y debe cesar.
Debemos cesar en nuestro vasallaje, en nuestro ridículo empeño por alacanzar su simpatía, su comprensión, su respeto. ¿Para que?, ¿para ganar acceso a unas herramientas que en realidad, nunca dejaron de ser nuestras?. ¿O es que acaso tenemos miedo de escuchar nuestra propia voz?.
Debemos ignoralos.
El teatro es nuestro. Tomemos el teatro.
Debemos hablarnos. Debemos escucharnos. Debemos escucharnos.
Debemos juntarnos con la música, con los cuerpos, con las palabras.
Debemos juntarnos con la paciencia agotada. Debemos quedarnos allí.
Tomemos el teatro.
Esto no es una convocatoria de manifestación.
Esto es una convocatoria de encuetro en nuestro masivo en nuestro teatro. Un punto de partida. Una oportunidad.
En la capital. En el espacio central. En el Salón Teatro de Santiago de Compostela.
El día 15 de Xulio, a las 11:00.
Difundir. Asistir. Confrontar. Destruir. Organizar. Transformar.