Gran Convocatoria Mundial

Maurice Blanchot. La comunidad de los amantes.

Mayo del 68 demostró que, sin proyecto, sin conjuración, podía, en lo repentino de un encuentro feliz, como una fiesta que trastornara las formas sociales admitidas o esperadas, afirmarse (y afirmarse más allá de las formas usuales de la afirmación) la comunicación explosiva, la apertura que le permitía a cada uno, sin distinción de clase, de edad, de sexo o de cultura, congeniar con el primero que pasa, como con un ser ya amado, precisamente porque era el familiar-desconocido.

“Sin proyecto”: éste era el rasgo, a la vez angustioso y afortunado, de una forma de sociedad incomparable que no se dejaba aprehender, que no estaba llamada a subsistir, a instalarse, aunque fuere a través de los múltiples “comités” gracias a los cuales se simulaba un orden desordenado, una especialización imprecisa. Al contrario que en las “revoluciones tradicionales”, no se trataba solamente de tomar el poder para reemplazarlo por otro, ni de tomar la Bastilla, el Palacio de Invierno, el Elíseo o la Asamblea Nacional, objetivos sin importancia, ni tampoco de invertir un mundo viejo, sino de dejar que se manifestara, más allá de cualquier interés utilitario, una posibilidad de ser-juntos que devolviera a todos el derecho a la igualdad en la fraternidad merced a la libertad del habla que sublevaba a cada uno. Cada cual tenía algo que decir, a veces que escribir (en las paredes); ¿qué en suma? eso importaba poco.

Hasta ahora, los filósofos y los artistas no han hecho más que interpretar las situaciones; de lo que se trata en adelante es de transformarlas. En la medida en que el hombre es producto de las situaciones que atraviesa, lo importante es precisamente crear situaciones humanas. El individuo se define por su situación, aspira al poder de crear situaciones dignas de su deseo.

International Situationniste

La Gran Convocatoria Mundial es un encuentro que tendrá lugar en el CSA La Tabacalera de Lavapiés. La Tabacalera es un espacio enorme en el centro de Madrid que se está llenando de vida poco a poco,  y esta es nuestra manera de activar el espacio, generando el mejor contexto para que cosas inesperadas ocurran, un lugar para la explosión. Nuestra rebeldía es serena, pero necesitamos que pasen más cosas, es un acto desesperado, un acto de agitación mental.

Pensamos que en el día de la Gran Convocatoria deben reunirse textos, instalaciones, acciones escénicas que de otra manera no se habrían encontrado. El 11 de junio, personas con diferentes trayectorias van a mostrar procesos, acciones, cosas que les importan. Algunas de las acciones serán simultáneas, para que la gente pueda circular libremente. Y al final, como siempre, todo terminará en un baile.

En este blog hemos empezado a poner materiales que nos inspiran, que van dibujando el paisaje del encuentro. Estamos abiertos a recibir vuestros materiales y vuestras ideas, que una idea lleve a otra, que un impulso lleve a otro. Este es el deseo, mostrar el principio de un movimiento, confiar en la alegría del encuentro.