Los pasados días 13 y 14 de marzo se celebraron en el Estruch (Sabadell) las 2º Jornadas Fanzineras Feministas, inscribiéndose en el marco que el nuevo curator de la NauEstruch, Marc Vives, ha abierto esta temporada 2014/15 invitando a artistas residentes que trabajan con el fanzine y la autogestión. Las primeras jornadas se celebraron en octubre y sirvieron como punto de partida y encuentro de diferentes agentes que se mueven alrededor del fanzine con perspectiva feminista. Además Ernest Graves, autor del primer cartel, impartió un taller de fanzines para adolescentes. Fiesta Gallarda debe su nombre a que las Jornadas pretendían además de ser un encuentro querían ser una celebración de la dimisión de Alberto Ruíz Gallardón el septiembre de 2014, después de se retirase la ley del aborto que el ministro propugnaba y que causó un rechazo inmenso en la población y en consecuencia, en las feministas, que tras tantos recortes y abusos por parte del gobierno actual y en materia de derechos, atisbábamos a ver por fin un triunfo.
Las segundas Jornadas empezaron un jueves, de noche y en un bar. Era parte del taller que había propuesto Toni Hervàs, titulado Zona Hermética y que debía su nombre a la famosa zona de discotecas de Sabadell. El material de trabajo, bebidas y la consiguiente borrachera, además de los encuentros con personajes de la noche bastante entrañables. Yendo a dormir a altas horas de la madrugada y después de bailar en discotecas con nombres como Kissing y _? dimos por cerrada la primera parte del taller. El viernes era el momento de poner en común lo vivido entre todos, y lo recordado por solo algunos, y hacer de ello una publicación, el fanzine Zona Hermética, compuesto por recuerdos y experiencias de Toni, Marc, Consol, Sergi, __ y servidora.
El sábado era el día más completo, y se abrió con el taller híbrido Penélope no espera 2 que hicimos Jesús Arpal-Moya (mitad de Jeleton) y yo. Un taller/club de lectura entorno al subgénero de la ciencia ficción feminista. El primer taller de Penélope no espera tuvo lugar en 2014 en Espacio Práctico, fue impartido por Gelen y Jesús (Jeleton al completo) y se llevó a cabo junto a una propuesta de Black Tulip sobre la exploración de la ciencia ficción. En él hablamos de películas, fanzines, brujería y las posibilidades del feminisimo y su voz dentro del género. Esta vez nos centrábamos en este movimiento que tiene sus bases en autoras del siglo XIX como Mery Shelley y Charlotte Perkins Gilman. Durante la primera parte del taller, el club de lectura, nos disfrazamos de Jane Austen con vestidos de flores y nos reunimos alrededor de una mesa con te y pastas, para a través de lo perfomático de esa acción de damas tomando el te, hablar de un género desconocido pero en auge, que tiene muchas facetas interesantes. Hablamos de autoras clave y sus obras, algunas fueron: Ursula K. LeGuin, Octavia E. Butler, Margaret Atwood y Joanna Russ, de la cual leeríamos en la segunda parte su relato Cuando todo cambió.
Después de comer fideuá iniciamos Sirenas y tritonas, un encuentro/presentación y debate abierto a partir de los fanzines, donde nos encontramos Bulbasaur, Cor Pelut, Anna Pahissa de Múltipos, Los archivos de Beauvoir, Nucelar y Rosa Parma (ambos residentes de NauEstruch), y servidora en representación de Nenazas y Blood. Juntas hablamos de los procesos de la autogestión, de feminismo y fanzine, de las preocupaciones de la endogamia del mundo fanzinero, entre otros temas.
Alrededor de las seis empezaba la segunda parte de Penélope, en la que los participantes del debate y de las jornadas y todo aquel que se quisiera unir, nos cerrábamos en una de las salas de ensayo del Estruch. Con las luces apagadas, cojines para tumbarse, diferentes instrumentos y sintetizadores iniciábamos la lectura del relato de Joanna Rus, en la que mientras unos leían los otros hacían ruidos y música, provocando una lectura diferente y haciendo de ella un acto performático. Ya en el primer taller que dieron Jeleton de Penélope pudimos experimentar con otro tipo de lectura performática, a partir de la lectura masaje aprendida de Idoia Zabaleta. Rituales que nos aproximan a la lectura de forma distinta para poder jugar con el texto y sentirlo de manera distinta.
Después de la lectura hubo los conciertos en La Sala de Expos, de Perlita y Les Sueques, dos grupos distintos pero que se complementaron muy bien. Mientras Perlita, en el que toca Jesús Jeleton, es rock folk español pausado, Les Sueques dieron el cierre con su toque rock punk riot girrrl. Y así ponían punto y final las jornadas, un lugar donde se encontraron y confluyeron intereses diversos con una misma raíz en común, perspectivas que se entremezclan, fanzines, música, performance y literatura, que generan una crítica simultanea y ramificada entorno al feminismo, que provocan debate y plantean problemas. Jornadas que esperemos que se conviertan en un evento anual, para seguir encontrándonos, para hacer fanzines y para bailar.