Por lo menos es estar presentes. Si no, no tiene sentido.
Conversación con Nazario Díaz
Durante la residencia he decidido conversar con otras artistas para expandir la investigación y hablar de temas comunes, saber más sobre las respectivas prácticas y reflexionar sobre los procesos artísticos. Mi postura es la de ir a visitar la práctica de otras artistas y partir de una pregunta básica: ¿tú cómo lo haces?
La conversación con Nazario queda algo borrosa, pero sí tengo claro que mientras hablamos mi cuerpo ya está recibiendo información nueva que contaminará mi practica actual. Me es difícil retener en la memoria algo tan efímero como una conversación, así que he empezado a escribir tras preguntarme qué recuerdo de forma inmediata, qué me mueve.
Los materiales: volver a visitar los materiales que ya han pasado por el cuerpo. El virtuosismo y la posibilidad de desaparecer.
La insistencia: el deseo y la necesitad de quitarse del medio (una de las cosas imposibles).
En realidad venimos de las cosas imposibles, negarlas es también estar en ellas, ¿no?
Nos movemos entre todas las cosas que operan pero que son invisibles.
La presencia y los cuerpos en vida: la necesidad de marcar una distancia entre sujeto y objeto. La búsqueda de estrategias de desplazamiento. El darnos cuenta de que estamos volviendo a los materiales de que queríamos huir.
El virtuosismo y la desaparición: ¿Qué es eso de borrarse? ¿Quién desaparece para quién?
La insistencia y la resistencia podrían ser intentos válidos, permanecer en un material y seguir su evolución. Borrarse porque la presencia del material es más fuerte que uno. Borrarse para que se pueda visualizar lo que pasa alrededor del cuerpo.
La danza ya existe: el cuerpo es solo un canal para la danza, es el contexto de la danza.
Se trata de cómo lidiar cada vez con la experiencia, la vivencia del material, en un proceso de emergencia de los materiales.
La compleja relación con la forma: ¿cómo emerge la forma desde un proceso? ¿dónde estaría la coreografía en este tipo de trabajo? O mejor, ¿cómo opera la coreografía?
La dificultad de estar presente: la necesidad de aceptar que es lo que es.
El compromiso con el material es difícil. La exposición constante a la mirada es algo que depende de muchos factores. Depende de si he tenido un buen día, si no estoy para dejar que me miren, si me puedo comprometer con la estructura que yo misma me he dado. ¿Qué fijamos? ¿Las formas del cuerpo?, ¿un recorrido interno?, ¿el tipo de entrega que logramos tener hacia el material?.
La transmisión del material no normativo: ¿cómo transmitir una postura?
Alfabetización y analfabetización del cuerpo. El aparato fonético, la fascinación por las distintas formas de hablar según la procedencia geográfica.
El sentido que siempre está en fuga: La inexistencia de la identidad. La danza no tiene sentido y no tiene utilidad, eso es lo guay. Entonces, ¿qué hace esto que hacemos en el espacio físico, imaginativo, corporal?
Lo natural no existe, pero la ficción está llena de grietas: Lo que pasa en el momento en vivo depende de las circunstancias. Los tiempos de la naturaleza. Los procesos de fermentación. El tiempo natural y tiempo teatral. El miedo a desaparecer.